RENOVADO

RENOVADO
La Isla de Flores, de ayer y de hoy.

ADIOS TULO, GRACIAS POR TODO

Quien no vivió un domingo de mañana en la sede de Canet,ver al Maestro, que parecía tener reloj y calendario, con una gran excitación psico motriz, sabiendo que había llegado el día del partido. Desde este humilde espacio queremos dejar este pequeño homenaje en memoria de nuestro amigo desaparecido por estas horas. Para hacerlo debo recordar diferentes momentos que me toco compartir de su vida, hace mucho años, cuando el TULO era aun un muy joven cachorro, recuerdo grandes "monitos" en el fondo de la sede (a pesar de las largas quejas de la Rosa porque le rompíamos sus plantas) en los que el joven cuadrúpedo siempre la quedaba al medio, era imposible que diera por perdida una pelota, corría sin parar un segundo, como si fuera alguno de nuestros baluartes un domingo cualquiera, trancaba con las muelas (literalmente) , dejando en claro que ya entendía bien lo que era ser un Isleño desde chico, a pesar del buen trato de balón de alguno de nosotros por esos días, no te lo podías sacar de encima, si la pasabas por bajo quitaba, si la pasabas por alto, saltaba y te la ganaba de arriba, dejándolo todo en cada balón, en aquel momento, ya en aquel tiempo (si no me equivoco hace una década aproximadamente) y por mucho tiempo mas se gano su primer apodo "Ruso Perez", los que lo vivimos lo debemos recordar. Años después, luego de un verano pre temporada en Sta. Lucia del Este, se lo veía cambiado, gordo, venido a menos, para lo que algunos osaron en correr un chisme que había mantenido relaciones sexuales con otro perro de su mismo sexo...a estos, nuestro amigo les dejo en claro luego su heterosexualidad dejando su semillita, demostrando ser un típico macho isleño. Al tiempo y con los años venidos encima sufrió una pequeña nana y su cara y alguna parte de su cuerpo sufrieron una parálisis, lo que no hizo que este dejara de sentir los colores como el primer día, y ganar sus últimos apodos "vieja", "Oscar Washington","maestro" y demás.

Con estos momentos hago un pequeño recuento de algunas de las anécdotas que marcaron los años que yo viví cerca del TULO. Por Códigos, Clase. Timing, Huevo, por no comerse ni la punta (nunca y bajo ninguna circunstancia, para recordar una sola de tantas, en el año 2009 casi sin dientes y atado del cuello dejo llorando a dos perros, carrasquitos, chetos, en cancha de CLT), humildad, constancia, fidelidad, no hacer la amistad con ningún contrario y muchas cosas mas, hoy el pueblo isleño esta de luto. Gracias TULINO, yo se que pronto nos veremos en el mas allá, para ladrar un tema, jugar un "mono", recibir de costado el aire fresco matinal del camión del ingles, cortar un ataque de cualquier cuadrucho que nos enfrente, etc etc. Quedara tatuada en nuestro corazón y grabada en la historia más grande de la Isla, por ser parte de las más recordadas hazañas de nuestra institución, tu propuesta de Guapeza, huevo y humildad. Espero que en estos días tengas tu debido homenaje-despedida. Algunas cosas para terminar, hace algunos años atrás, creo que estábamos en la E, o en la D, uno de los primeros domingos en los que el tulo comenzó su cabala (si no el primero, por lo menos de esta ultima etapa, según recuerdo), con un Alejandro "teita" pubertoso que recién comenzaba a concurrir los domingos, solos, frío invernal, camión del ingles, Tulo, Toto y quien escribe, solos, inventamos este tema que quiero dejarles: "...Vino el Tulo, en la cancha hacemo uno, a los putos e los milicos, hoy los vamos a cojer...dale cali, dale cali, dale cali, dale dale cali..."a ritmo de colegiala. También les voy a dejar una anécdota de uno de sus hermanos, Felipe, que pintan de cuerpo entero a nuestro amigo: "...Quiero contarte una anécdota cuando era cachorro que pinta de cuerpo entero lo que iba a ser su carácter. No tenía ni cinco meses cuando lo llevamos junto con nosotros a pasar el día a lo de mis abuelos en Parque del Plata.


Lo soltamos y jugó todo el día con el Forchi, el perro de mis abuelos. Este último era un boxer gigante, 100% músculos, que justamente le había quedado ese nombre por ser el mas grande de todos sus hermanos.
Habían jugado todo el día, tanto que nos reíamos de la paciencia que tenía el perro adulto que no podía sentarse un segundo porque el Tulo estaba intratable. Había pasado todo el día y ya era oscuro cuando no se exactamente de dónde salió un perro policía tan grande como el Forchi, y los dos grandotes se empezaron a pelear que daba miedo.
Hasta ese entonces (tendría 14 años) había visto varias peleas de perros pero sin dudas que ésta era por lejos la mas violenta que había presenciado. Estaba re garcado porque las fieras estaban grandes, hacían unos ruidos terribles de gruñidos y la pelea no paraba. Recuerdo que no los podían separar. Por más que yo obviamente hinchaba por el Forchi, debo ser objetivo y reconocer que al menos por puntos el policía llevaba la delantera.
Lo curioso del cuento es que, con apenas cinco meses cumplidos, el Tulino había tomado partido y en plena trifulca, cuando ninguno de los seres vivos que andábamos cerca nos animábamos a acercarnos, de atrás le mordía la cola al policía!!!
Lo hizo más de una vez. Iba sigiloso y se le prendía de la cola. Cuando el policía se daba vuelta como para comérselo, El Tulino ya había rajado logrando lo que indudablemente había planificado: distraer al enemigo para que el Forchi lo aprovechara.
Fue increíble ver como un bichito tan pequeño tenía tanta personalidad como para no solo tomar partido por su amigo sino además intervenir.



Un grande!...”


Esperemos que su primogenito (por estos dias con una ausencia total de codigos y demas) pueda lograr un 30 por ciento de la larga trayectoria del recordado como primera cabala de nuestro equipo. Seguira el mito de la mano del TITO...

Sobran las palabras...GRACIAS TOTALES TULO

En memoria de un gran isleño de pura cepa. R.I.P.